Crónica Carrera del Jurásico. 6 de Octubre 2018. Por Félix.


 Lastres-Colunga, éste es el trayecto a completar en esta carrera. Vuelvo al exigente asfalto para completar estos 6,7km vertiginosos de continuas subidas y bajadas. Cada vez me atrae menos la velocidad agónica pero cuando hay cierto desnivel la cosa cobra encanto para mi.
 Quique corre con los minibenjamines un tiempo antes. Justo cuando escampa una gran tormenta. El ambiente es húmedo y fresco y sopla aún leve brisa marinera. Tras animar al guaje cojo el transporte que nos lleva desde Colunga a Lastres. Allí caliento con Kiko y vuelvo a ver caras de asfalto con las que hacía tiempo que no coincidía. Busco, como siempre con quien emparejarme, alguna referencia. Pero de poco me vale cuando a las 17h se da la salida y busco ya las primeras posiciones a tenor de lo ligero que me encuentro, sobre todo en este primer tramo cuesta abajo. Luego pequeña cuesta inapreciable por el impulso inicial y más cuesta abajo. Se va primero Bengoa, a la postre ganador con diferencia notable. Se forma un grupo perseguidor y un segundo grupeto detrás. Yo los veo y decido enseguida que ese es mi objetivo. Tardo muy poco en alcanzarles. Me veo muy fuerte y casi me dan ganas de ir a por esas primeras posiciones, pero me freno. Sería un suicidio.
 El trazado sube y baja sin parar como ya he dicho. Hay una subida más larga de 1km por la que me hallo ahora. La conozco, aguanto. Se disgrega mi grupo, algunos se quedan y otros ponen tierra de por medio conmigo. Aguanto mi posición y no me rebasa ya nadie más.
 Mantengo distancias. Sigo salvando los desniveles. Aprovecho las bajadas. Conozco bien el recorrido, dejo fuerzas para la última subida hacia Colunga. Km 4. Me anima mi familia enloquecida. Debo ir bastante bien situado. Los guajes se desgañitan. Hago la rotonda. Tengo a tiro a un puñado de corredores. Los pongo en el objetivo al afrontar este duro repecho. El viento nos da de cara, no es fuerte pero mina las fuerzas. Giramos a derechas para volver a entrar en el pueblo en una larga recta final, donde dejo atrás a dos corredores que van muy justos. Yo siempre he ido “cómodo”, con una marcha más, que uso ahora, en los 400 metros finales para llegar con ventaja. No es suficiente para alcanzar a los hombres que llegan ya a meta, los veo a los lejos. Yo llego un minuto después en 23’ 36”. Mejoro ostensiblemente mi tiempo de 2015. Y es que me he colocado en la posición 11º gral. y 4º Vet +35a. Casi toco cajón.
 Estoy tan sorprendido como contento. Mi familia me da la enhorabuena
.







Comentarios

Entradas populares